No estés triste mi cariño
no empiezo nunca si no me sonríes,
o tocas mi alma con dedos de poeta,
o con tus labios fuertes
que dicen mentiras
porque no quieres perderme.
No voy a dejarte,
nunca, solo entre tus cuatro paredes,
yo, que solo espero ver luz en tu ventana.
Y mi corazón late intensamente
al saber que al abrirse la puerta
veré tu cara de niño.
Y no entiendo,
porque contigo me derrito
como el hielo
si dejaste de ser un chiquillo hace mucho,
entonces te adopto
para que nunca te quedes solo.
Pero solo no estás nunca
y yo me engaño
y tu no mientes,
como quisiera ser esa
por quien no duermes en las noches,
yo solo te robo sonrisas.
Tus ojos se ven tan tristes, mi cariño,
pero nunca miras hacia mi lado
el mas puro,
tus ojos no ven mas que lo superfluo
en mi cuerpo desnudo
y mis cabellos negros.