jueves, 12 de septiembre de 2013

PENSACOLÍA

Así pase por tu vida
rápido y no deseada,
como una plaga de langostas
pasé por tu vida
y arrasé a mi paso corto
con mi buena imagen y el carisma
hasta con la acostumbrada sensualidad
he acabado
(ahora ni para servir el té, te sirvo).
Así pasaste por la mía
lento, lento y adherido
como una oruga en mi ventana
y dejaste todos los olores y la sonrisa
la melancolía entera 
y el amor sobre mi
(te extraño)
si es para tomar el té, te sirvo.

Entonces espero
ahora a la hora tuya
que vuelvas a creer
que soy la reina que contemplabas
absorto y lleno de fascinación.
Espero que no te des cuenta
de lo que no dije
de lo que nunca podré hacer contigo
(no puedes ni imaginarlo).
¿Por qué has pasado tan lento por mi ventana?
Aún no termino de escuchar
que a mi te presenten
y ya tengo que olvidarte.
Y me voy dando cuenta
que si te he amado
es porque eres bueno 
como un niño
o malo como los canallas,
que si dejara de amarte
no dejas de estar presente
aún cuando no vuelvas a pasar a mi mesa
para hablar de lo importante
y de izquierda
tomando mi derecha
para pedirme matrimonio
o para llorar sobre tu hombro.

No hay comentarios:

Publicar un comentario